¡Un lugar donde florecerán las cenizas de sus seres queridos!
El bosque de los mil guayacanes es un proyecto de conservación ecológica y de embellecimiento del paisaje del departamento Quindío liderado por el Jardín Botánico del Quindío a través de su Escuela de jardinería y horticultura. Tiene como objetivo plantar, mantener y preservar en el tiempo mil guayacanes amarillos Handroanthus chrysanthus, en la finca el Recreo en Calarcá, propiedad de la entidad, con el cual se busca capturar en este bosque por lo menos 3.500 toneladas de dióxido de carbono, gas prioritariamente responsable del cambio climático en el planeta. A su vez, se pretende contribuir al embellecimiento del departamento del Quindío, al organizar un espacio colorido aprovechando la majestuosa de floración de los guayacanes.
Este bosque será un bello y digno lugar para ubicar y rendir tributo a esos seres que en vida y luego en nuestra interioridad han significado tanto para nosotros, dado que cada árbol de este maravilloso lugar contendrá las cenizas de una persona que, con el tiempo, se integrarán a través de sus raíces para ofrecer vida y color al paisaje.



Este hermoso lugar lo complementa una obra de arte construida en guadua, “la Ermita”, diseñada y construida por el arquitecto Rafael Garay, que servirá de lugar de evocación de los seres amados, introspección para la despedida y comunicación permanente que florecerá en este lugar. Igualmente contendrá un sendero en trazado bajo la modalidad arquitectura sin barreras que permitirá a cualquier persona acercarse al árbol sembrado en honor de esa persona cercana a nuestros afectos a una distancia no superior a 10 m entre sí. Y junto a cada árbol solo habrá una placa pequeña de 20 cm X 10 cm con el nombre de la persona a quien le fue dedicado el ejemplar